ELECCIONES 2014 EN URUGUAY, EN LA RECTA FINAL: EL VOTO POR OBLIGACION

Se está en la recta final de unas elecciones completamente atípicas. La dirigencia de algunas listas importantes del Partido Nacoional, el único capáz de derrotar al Frente Amplio, no oye a sus dirigentes, y continuan empecinados en reunir a los mismos una vez a la semana, impidiendo esta vez, que la mayoría de ellos puedan concurrir a esas reuniones, por hacerse en un día impropio para la mayoria; por ello hay menos clubes politicos de ese partido en Montevideo, muchos menos. Importantes zonas como el siempre dejado de lado oeste de Montevideo, que siempre tenía  locales partidarios de varias listas de ese partido, por este motivo, carece de ellas. Y no es que esos dirigentes principales no lo sepan, sino que lo saben y aún así no hacen reuniones cuando la gran mayoría pueda concurrir. Están trabajando para que el partido pierda. El partido Colorado, por otra parte, no contesta los mails que se le envia al cadidato a la presidencia, Pedro Bordaberry. Además, ni el Partido Nacional, o Blanco, ni el Colorado, presentan propuestas, solo criticas a este gobierno y la propaganda, tampoco incita al voto por cualquiera de estos partidos. Esto aumenta la incertidumbre y la indecisión del votante de qué votar el 26 de octubre.
Además, los datos de las encuestadoras, han sido manejados por el partido de gobierno (datos que no se sabe de donde proceden, porque nadie conoce a nadie que haya sido encuestado por estas empresas) Fué decir el presidente Pepe Mujica que no eran reales los datos cuando el Frente tenía según ellas, numeros del 42% y menos, para que subieran a los pocos días. Lagente tampoco está concurriendo a los actos de los partidos tradicionales, como al principio, además que ningún partido este año, ha puesto locomoción partidaria a los actos, como se hizo siempre, desde las zonas más alejadas de la ciudad.
Las carabanas son también cada vez más reducidas en numero de vehiculos participantes, lo que muestra que, solo porque es obligatorio la ciudadanía concurrirá a las urnas, pero que puede salir cualquier cosa como resultado de esa concurrencia. Lo que si es seguro, que muchos no quieren votar ni van a votar al actual partido de gobierno, y eso no se lo va a cambiar nadie.